La historia se centra en un payaso de la televisión llamado Robbie, el cuál sufrió abusos por parte de su padre, por lo al crecer se dedica a vengarse de gente que abusa de los niños. Corto realizado con la intención de obtener financiación para la secuela del film "Maniac" (1980) pero la repentina muerte del actor Joe Spinell trastocó los planes iniciales.